lunes, 30 de junio de 2014

Diego Sosa: “Al jefe no le gusta que la gente vuele sola”

Diego Sosa, conferencista internacional en el área de crecimiento personal y profesional, escritor, coach y consultor empresarial, decidió compartir sus conocimientos acerca de la relaciones interpersonales y la inteligencia emocional a través de “Migomismo II”, su décimo tercer libro.

Foto: Marvin Del Cid
Su libro tiene un nombre muy particular, ¿alguna razón en especial le hizo titularlo de esta manera?
El proyecto ‘Migomismo’ comienza con la inteligencia emocional, con la primera persona, la más importante en mi vida, porque todo el mundo quiere dominar a los demás. La idea es dominar mis reacciones, el “yo” como primera persona del centro de mi vida.

Según usted, este libro está escrito para todos los habitantes del planeta. ¿Qué encontrará quien lo adquiera?
Va a encontrar todo lo que son las relaciones humanas, que son tierra fértil para conflictos, son la parte interesante de la vida en sociedad. Encontrará las herramientas necesarias para manejar las relaciones, tanto en sus buenas como en sus malas, o sea que cuando haya conflictos encontrará cómo resolverlos. Estamos trabajando la empatía, encontrará experimentos que se han hecho últimamente para encontrar las neuronas espejo, tenemos un montón de cosas interesantes.

¿Alguna de las historias o de los personajes que aparecen en el libro son reales?
Hay muchas vivencias. No es digamos una historia verídica, pero todos los lugares que visitan los protagonistas en el norte de Alemania son lugares muy míos,  lugares que visito. Son reales puestos en una historia inventada.

O sea que también será un viaje geográfico…
¡Como todos mis libros! Es un libro conociendo también la parte geográfica, hay dos que fueron aquí en República Dominicana y estos últimos dos (Migomismo I y Migomismo II) son en lugares de Alemania donde vivo.

¿Por qué las personas necesitan ayuda para aumentar su EQ (Coeficiente de Inteligencia Emocional)?
Necesitamos ayuda porque las herramientas que se encuentran empíricamente hoy no las traemos de fábrica, relacionarnos con los demás es una cosa y relacionarnos bien es otra. Nosotros duramos como humanos 7 millones de años corriendo en el monte, saliendo al bosque a cazar, y en los últimos 2 mil años hemos tenido una vertiginosa evolución en lo que es la civilización. Anteriormente huíamos de un animal, hoy cuando encontramos a alguien que nos enfrenta tenemos que lograr solucionar el conflicto. Anteriormente nuestra inteligencia emocional nos decía: “Mata al perro”, “Mata al león”, “Corre y súbete en una mata”; hoy nuestra inteligencia emocional nos dice: “Al león que va en otro carro déjalo que se vaya solo”, “Déjalo que se estrelle solo”,  “No pelees con él porque fácilmente sales muriendo”, y así pasas la vida, pero para eso hay que entender cómo nuestro cerebro está programado para reaccionar. Es una herramienta que necesitamos, por eso necesitamos obligatoriamente que alguien nos diga cómo funciona y cómo hacer uso de ella.

¿Y qué tan beneficioso es aprender a manejar la inteligencia interpersonal?
Nos sirve para el área de las ventas, por ejemplo, el área de servicio. Nos sirve para relacionarnos con nuestros compañeros, con nuestra pareja, con nuestros hijos, con nuestra familia, con nuestros amigos, es la herramienta necesaria para crear relaciones buenas y eficientes, tanto en el área del dinero, o sea en el área profesional, como en el  área personal. Siempre digo que nos contratan en una empresa por nuestras aptitudes, o sea por nuestros conocimientos, pero nos despiden por nuestras actitudes, de ahí viene la inteligencia emocional, nuestro EQ, nuestro coeficiente emocional que nos lleva a relacionarnos con los demás de una forma. Aunque tengamos mucho conocimiento, si no logramos pasar esos conocimientos a resultados que se puedan medir, terminamos perdiendo el trabajo.

Y en ese sentido, ¿qué  usted recomienda: que la empresa se dedique a impartir cursos o que el empleado los busque por sí mismo?
Las dos cosas. Recomiendo más a la empresa porque es una filosofía de trabajo, una imagen corporativa. Cuando una persona va y toma un curso, multiplicarlo dentro de la empresa es muy difícil, pero cuando la empresa completa lo toma todos están a una, empujando hacia un mismo lugar, hacia un mismo tiempo. La empresa debe ser la base para todo lo otro.

En uno de sus capítulos enseña cómo tratar a las personas difíciles, ¿pero cómo esa persona descubre que es una de ellas?
La mayoría de las personas no quiere decirse: “Tengo responsabilidad de lo que me está pasando”, hay gente que cree que todos conspiran contra ella, todos son los difíciles. Yo digo que cuando una persona te dice que pareces un camello, no tendrías que preocuparte mucho, pero si tantos lo dicen hay que ir al espejo a ver si tienes una totuma. Cuando estamos esperando que los otros cambien, definitivamente nuestra vida no cambiará. Cuando trabajamos con personas difíciles, seguirán siendo difíciles a menos que ellos lo decidan, pero puedo hacer mi relación con ellos lo mejor posible o decidir no querer nada. Si es en lo profesional necesitaré algo que ver con ellos, puede ser un jefe, un compañero, un colaborador, un cliente, entonces tengo que ver cómo llevarme con ellos, cómo lograr lo mejor con ellos. No siempre se logra, muchas veces hay que salir corriendo y dejarlos.

¿Y cómo se le saca provecho a las diferencias?
Todos somos diferentes. Algunos son mejor para una cosa, otros para otra, debemos entender que no tenemos que saberlo todo sino conseguir que los que saben algo colaboren con nosotros. Hay gente que lo quiere saber todo y eso hace que cuando encuentra a alguien que sabe más, se bloquea. La idea es que cuando tengamos diferencias lograr que cada uno aporte lo que sabe para conseguir un mejor equipo y resultados mucho más eficientes y eficaces.

Pregunta tonta: Se nos ha enseñado que debemos separar lo profesional de lo personal, ¿entonces por qué se necesita tener relaciones afectivas en el trabajo?
Si paso ocho horas con una persona en el trabajo y solamente la veo como profesional, me estoy perdiendo una parte importante de ella. No digo que tengo que tener una relación afectiva con todos, la idea es que encuentre cómo es esa persona, cómo trata, cómo quiere ser tratada, para entonces tratarla como quiere, de esa forma logro conseguir lo mejor con esa persona y hacer que la empresa consiga lo mejor de todos en conjunto. Si solamente trato la parte profesional, posiblemente no tengamos la ayuda que necesitamos en un momento determinado. De esas relaciones afectivas sale una amistad fuera del trabajo, lo que no es recomendable es tener pareja porque ya se entra en un vínculo diferente que puede terminar afectando el trabajo.

Pero hay empresas que lo aprueban…
Hay empresas que lo aprueban, pero tratan de que estén en departamentos separados, porque por más que uno quiera, llevamos los problemas personales al trabajo, y una empresa no puede parar porque haya dos personas que, en su casa  o en su vida personal, tengan una discusión y después no quieran colaborar en la empresa o comiencen a meterle el pie al otro para que se caiga, porque me fue  infiel o porque no me trata como quiero.  A veces se termina la relación y termina la empresa teniendo problemas, por eso lo recomendable es separar esas personas en departamentos diferentes  para que  no afecte su trabajo.

Hay quienes son líderes naturales, ¿pero qué se necesita para ser uno muy bueno?
Lo de los líderes naturales es relativo. Hay gente que dice que nació líder, pero no  utilizó desde el principio las herramientas que hacen que se les reconozca como tal: la humildad, la sencillez, la afabilidad, el servirle a los demás, todas esas herramientas que detallo en el libro. Puede ser que una persona desde chiquito se dé cuenta o las vea en su casa y las comience a utilizar, por eso los otros lo toman como un líder. Hay líderes que son imponentes, que desde chiquito ves que todo el mundo los sigue por fuerza, porque le tienen miedo y esos cuando pasa un tiempo terminan en la cárcel o perdiéndolo todo. El liderazgo era solamente mientras podían ejercer poder sobre un grupo de personas. Entonces, líder no se nace se hace, lo que hay que buscar las herramientas que un líder tiene e imitarlas. Tomemos líderes religiosos, políticos que han muerto, que han llevado a un grupo de gente a convertir un país en algo diferente como lo fue Juan Pablo Duarte, Mahatma Gandhi, Dalai Lama, que buscan un objetivo y tienen un comportamiento que hace que nosotros digamos: “Ese es un líder”, no se impone, no es con dinero, sino con un ideal y con una forma de actuar.

Entonces esos que se imponen al final se convierten en  jefes…
Se convierten en jefes y terminan perdiéndolo todo. A la corta o a la larga terminan perdiéndolo todo porque la gente no los sigue. Terminan siendo un grupo que no consigue el máximo, porque cuando tenemos un jefe lo que hagamos es lo mínimo posible para mantener nuestro trabajo y los buenos talentos terminan yéndose de su lado, entonces se queda con lo que llamo “papagayos”, los que repiten lo que el jefe dice, para que el jefe esté contento, y no las águilas que pueden volar solas, que buscan otra orientación, consiguen otra visión para hacer las cosas de una manera diferente. Al jefe no le gusta que la gente vuele sola.

2 comentarios:

  1. Siempre que oigo hablar a alguien de relaciones humanas me toma poco darme cuenta de que se trata de manipulaciones humanas.

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